Las declaraciones fueron de Kim Yo-jong hermana del dictador norcoreano Kim Jong Un, quien dijo que no se llevaría a cabo una nueva cumbre entre Corea del Norte y Estados Unidos, “creo que la cumbre es innecesaria e inútil por lo menos para nosotros, no solo este año, sino más adelante”, agregó que dicha reunión entre ambas naciones solo sería posible si se da un “cambio decisivo” en la posición actual de Washington, finalmente aclaró que es su opinión personal frente a este hecho.
Cabe señalar que Pyongyang reiteró que necesita su arsenal como método de disuasión ante una posible invasión estadounidense también ha insistido en que Washington levante las sanciones económicas con las que castiga a Corea del Norte como un acto de buena fe en el proceso de negociación, a lo que EE.UU se ha negado siendo este el principal impedimento que llevó al fracaso la segunda reunión entre Kim y Trump, en febrero de 2019. Por su parte Biegun en su reciente visita a Saúl resaltó que Washington está abierto al diálogo con Pyongyang además confía en que hayan avances para lograr la desnuclearización de la península coreana, siendo este el objetivo final de las cumbres que se han realizado desde el 2018 entre Donald Trump y Kim Jong Un.
Sin embargo Kim Yo-jong enfatizó «no estamos diciendo que nunca habrá una desnuclearización (de Corea del Norte), pero estamos dejando en claro que no lo vamos a hacer ahora» y aunque no ahondó en el tema Washington despliega 28.000 militares en el Sur de la península para defenderse de su vecino y tiene presencia militar en Japón y en la región del Pacífico. En cuanto a Kim Jong Un declaró en diciembre el fin del aplazamiento de los ensayos nucleares y balísticos mientras que Pyongyang dijo repetidamente que no tiene intención de proseguir negociaciones a menos que Washington abandone lo que considera una política «hostil» con el Norte.