Los comandantes guerrilleros Iván Márquez, Hernán Darío Velásquez alias “el paisa” y Seuxis Pausias Hernández alias “Jesús Santrich” reaparecieron esta semana luego de 14 meses, desde el 29 de agosto del año pasado, cuando decidieron renunciar al acuerdo de paz y retomar las armas. En el comunicado emitido en su portal web, los subversivos piden la renuncia de Iván Duque a la presidencia, y muestran su inconformidad con la administración en curso; haciendo fuertes críticas al fracaso del proceso de paz gracias al reducido apoyo del gobierno nacional.

«Duque debe irse anticipadamente de la presidencia de la república, es un mandatario ilegítimo, porque le quedó grande el más elevado cargo de la nación porque quiere borrar a plomo, las movilizaciones sociales que hoy estremecen al país, y porque Colombia no quiere la dictadura”. Es un poco de lo que se lee en la expresa petición de los partidarios al presidente Duque y que va acompañada de una fotografía en la que se les ve luciendo uniformes de las ‘FARC-EP’ y portando armas evidentemente sofisticadas.

Para la guerrilla de nada sirven los pañitos de agua tibia del gobierno, cuando en lugar de ayudar a los más necesitados en medio de un confinamiento y sin nada que comer, ayuda a los empresarios que fácilmente pueden sostenerse, además señalan que se debe poner fin al exterminio de los líderes sociales y sobre todo a los excombatientes de las FARC, pues ya son casi mil muertos desde la firma del acuerdo en 2016.


Los comandantes hicieron un llamado a las movilizaciones y a “volver a las calles con marchas, plantones y cacerolazos para expresar la inconformidad de un pueblo contra un mal gobierno” pues es hora de exigir el cese de la represión de las entidades estatales y la fuerza pública y el respeto constitucional a la protesta social. Por último pidieron total claridad en el escándalo de la ‘Ñeñepolitica y el freno a la impunidad para Álvaro Uribe.

Aunque ha pasado más de un año desde que los disidentes decidieron abandonar el proceso de reincorporación, lo cierto es que este pronunciamiento se conoció días después de la conmemoración de la firma del acuerdo de paz, hace 4 años. La fotografía de la reaparición generó rechazo en algunos sectores políticos que no desaprovecharon la oportunidad para recordar que las órdenes de captura y recompensas que se ofrecen por información sobre el paradero de los guerrilleros siguen vigentes.