A pesar de las pérdidas globales en la economía es de grandes proporciones, comparada a la crisis que generó la segunda guerra mundial, donde la afectación al comercio nacional fue aún mayor que en otros países y tanto así que el PIB ha descendido 29 décimas a comparación al año pasado.
Varias micro empresas y locales comerciales se vieron obligados a cerrar, debido a la crisis sanitaria teniendo en cuenta que los ingresos eran casi nulos. Por si fuera poco, los colombianos durante la cuarentena, decidieron abastecerse en productos de alimentación no perecederos como granos y enlatados, esto beneficio durante los meses de abril y mayo a los grandes supermercados de cadena, pero también con el tiempo se incrementaron los costos de los productos, después de estos meses se evidenció un elevado consumo en tiendas de barrio y plazas locales de mercado.
Por otro lado, están las empresas afectadas, por la interrupción en la cadena de suministros, ya que los insumos esenciales utilizados en la producción, provenían del extranjero, a raíz de la política de algunos países las exportaciones e importaciones, fueron suspendidas, esto generó afecciones directas a la producción durante un largo periodo, reduciendo los ingresos de dichas compañías al punto de declararse en bancarrota, pese a las ayudas brindadas por el gobierno.
En la actualidad Colombia se encuentra en el puesto 47 de la lista global de PIB (producto interno bruto), para sacar estos listados se tienen en cuenta aspectos como entrada de ingresos, capital económico y recursos de los que dispone el país, el país está en una difícil situación, debido a la crisis sanitaria, una economía débil sin bases y también se debe tener en cuenta que los países con quienes se tienen tratados comerciales están consumiendo productos nacionales, para poder impulsar la economía interna de los mismos, aunque se asume que ya pasó lo peor, las especulaciones económicas hablan de que Colombia puede caer en la lista, llegando al puesto número 52, pues los ingresos actuales son muy bajos para que la economía crezca o al menos sea estable.