Con “Que haiga paz”, se da inicio a este ciclo visual que se adentra en una parte del conflicto en Colombia en la cinemateca distrital gracias la unión de la Comisión para la paz y al Instituto Distrital de las Artes.

Este lanzamiento se dio como un pilar fundamental que ayude a hacer memoria en cuanto al conflicto colombiano y sus variantes, en esta película documental su director Tomás Pinzón Lucena se encarga de mostrar y a su vez de narrar: las vivencias e ilusiones de guerrilleros en Colombia. 

Su rodaje se realizó en el año 2016 en el campamento de Alfonso Cano, cuando estaban las Farc en estos territorios. Durante este tiempo el director logró tomar historias, e intimidades de todo lo que hay detrás del conflicto armado, de hombres y mujeres que reflejaron sus sueños, miedos y más. Esto se daba días antes al plebiscito, de hecho en las escenas se incluye momentos en los que se vivió el “no”. 

Para Catalina Valencia la directora de Idartes, esta es una oportunidad para poder avanzar en las prácticas artísticas y culturales construyendo un tejido social entorno a crear memoria, generar una reparación simbólica, y mejoras en convivencia en territorios que han sido afectados por la violencia. 

Tomada de la página de Idartes

Con este filme también se busca generar nuevos espacios de diálogo entorno al conflicto, encontrando nuevas narrativas para los colombianos logrando que se conozca la verdad y realidad de la guerra desde otro punto, reflexionando sobre hechos pasados y buscar una reconciliación hacia un camino de paz. Sumado a esto dentro de la programación se dará un espacio para presentar obras visuales tanto locales como nacionales, junto a conversatorios en torno a la importancia de la reconciliación. 

El documental se presenta como una propuesta para ampliar la audiencia general, a que sean partícipes de los relatos de violencia que ha vivido el país, y además que se puedan hacer visibles las comunidades que se han visto afectadas por el conflicto y que muy pocas veces tienen voz.