Una lucha eterna, así llegan a tornarse muchas relaciones a causa de la violencia intrafamiliar, que no sólo se presenta en Colombia sino alrededor del mundo. Según medicina legal, entre enero y mayo del 2018, se registraron 32.445 víctimas de violencia intrafamiliar en el país. Sin embargo, debido al confinamiento estas cifras han tenido un drástico aumento.

“La violencia intrafamiliar es el delito más denunciado, después del hurto. Solo en lo que va corrido de este año, la Fiscalía ha registrado más de 60.000 denuncias por violencia intrafamiliar”, así lo afirmó la Vicefiscal General, Martha Janeth Mancera para El TIEMPO. 

Esta problemática  se ha convertido en un calvario constante para muchas mujeres, niñas y niños del país, debido a que se encuentran bajo el mismo techo que su agresor. De allí la importancia de conocer y estar informados frente a esta problemática social que sigue creciendo con más fuerza en este tiempo de pandemia.

De acuerdo con la recolección y análisis de datos, el Observatorio Colombiano de las Mujeres, afirma que se recibieron un total de 3.951 llamadas entre el 25 de marzo y el 23 de abril del 2020, mientras que en el mismo periodo en 2019 fueron 1.504. Estas cifras indican que la casa, el cual se supone debe ser el lugar más seguro y confiable para la familia, es el lugar más peligroso para ellas. 

Con respecto a lo anterior, basta solo con revisar los reportes diarios de los medios de comunicación para darse cuenta de los altos alcances que han tenido las denuncias por casos de violencia intrafamiliar o violencia doméstica durante el aislamiento obligatorio.

Estos indudables aumentos nos hacen preguntarnos si, ¿de verdad se están implementando las estrategias necesarias para garantizar el bienestar y el cumplimiento de los derechos de estas mujeres o si se están haciendo los de la vista gorda?.