El pasado jueves en medio de la reunión de la ONU con diversos jefes de Estado de distintas partes del mundo, para discutir el aumento de contagios e incluso muertes a causa de la pandemia, varios miembros solicitaron que la obtención del medicamento contra el virus sea equitativa.

Actualmente, se registran cerca de 65 millones de casos de Covid-19 a nivel mundial, debido a esto la Organización Mundial de la Salud, ha recalcado que la vacuna no dará fin a la enfermedad por sí sola. Los diversos asistentes al encuentro con la ONU aprovecharon el espacio para plantear los escenarios críticos que atraviesan como consecuencia del coronavirus, dado que las afectaciones evidentemente abarcan la salud, pero además la economía y el factor social. Igualmente, se planteó el hecho de que hay varios antídotos en última fase, es decir, prácticamente listos para su distribución, algo que según los líderes de los países debería ser un «bien público global» sin preferencias.

Michael Ryan, director de emergencias de la OMS, manifestó durante una rueda de prensa que: «no todo el mundo tendrá acceso a las vacunas a principios del año que viene». Así mismo, el general del ente, Tedros Adhanom Ghebreyesus, afirmó que la posibilidad de acceder a una vacuna «nos da aliento a todos, podemos empezar a ver luz al final del túnel», sin embargo, expresó su preocupación ante la posición de quienes asumen que ya todo terminó, «la verdad es que en estos momentos, muchos países están sufriendo una alta transmisión del virus, lo que pone enorme presión en hospitales, cuidados intensivos y trabajadores sanitarios».