Debido al motín ocurrido en horas de la noche, el 21 de marzo de 2020 en la Cárcel y Penitenciaría de Media Seguridad de Bogotá ‘‘La Modelo’’, que dejó como resultado 24 presos muertos, pero además cerca de 90 heridos, entre ellos miembros de la guardia. La Procuraduría General inició una investigación disciplinaria al director del lugar, Carlos Augusto Hincapié, así mismo, al director encargado, el mayor Jorge Gama Doza, la comandante de custodia y vigilancia, la teniente Elizabeth Vergara Vergara.
Por las presuntas irregularidades, el ente de control decidió averiguar al respecto, para definir las causas del enfrentamiento, entre guardias del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC), los cuales hicieron uso de armas de fuego, para controlar la situación y los presidiarios, quienes se encontraban protestando, contras las medidas preventivas tomadas por las autoridades de la cárcel con el fin de prevenir el contagio del covid-19. Además, se investiga quienes dieron la orden de abrir fuego e igualmente, si la cantidad de guardias era suficiente.
En documentos del INPEC de días anteriores al acontecimiento, se advertía la posibilidad de alteraciones, debido a las normas de contingencia que estaban tomando al interior del penal, así como la falta de atención en la salud de los presos, también señala que la empresa encargada del bienestar de los internos, no estaba garantizando el servicio sanitario como debía ser, así que los directores del sitio, debían solucionar la atención de los planes de emergencia.
En un apartado de los documentos, señala lo siguiente «este fin de semana va a ser complicado, es importante socializar muy bien las medidas, para muchos no va a ser muy fácil de entender la situación que vive el país; este fin de semana los Directores ERON deben estar muy pendientes, tenemos que estar al frente de los Establecimientos, por la situación crítica que se está viviendo, ya deben haber coordinado con Policía Nacional y Ejército Nacional el apoyo en caso de presentarse un amotinamiento, las coordinaciones necesarias con las autoridades, instituciones de salud y demás».
De acuerdo con las necropsias practicadas por el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses, la causa de la muerte de los 24 internos fue por proyectil de arma de fuego.