La expresidenta de Chile y ahora Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos lanzó un duro llamamiento a las autoridades colombianas para tomar medidas en el cuidado de la población. Además, lamentó las décadas de violencia a manos de grupos armados ilegales, grupos criminales y la normalización de esta violencia sobre todo en las zonas rurales.

“Condenó el incremento de la violencia ejercida por parte de grupos armados no estatales, grupos criminales y otros elementos armados en Colombia, en contra de campesinos, indígenas y afrocolombianos, e instó a las autoridades del Estado a tomar acciones concretas para proteger eficazmente a la población”, señaló Michelle Bachelet.

También contó que la oficina de la ONU tiene registradas 66 masacres y 225 personas que han sido asesinadas, la mayoría en zonas rurales del país. Añadió que 120 defensores de Derechos Humanos han sido asesinados en lo que va del año, y desde el acuerdo de paz firmado en la Habana la misión de verificación de la ONU en Colombia ha documentado 244 excombatientes de las FARC masacrados.

“Es trágico ver a tantas personas ser víctimas de la violencia persistente a lo largo del país. Además de estos asesinatos, las víctimas incluyen, por supuesto, a los que se quedaron, quienes permanecen casi completamente indefensos”, dijo la Alta Comisionada

Señaló que la comunidad indígena Nasa ha sido una de los más afectadas con 66 integrantes de la comunidad asesinados en el 2020 en la región del Norte del Cauca, por otro lado, hizo un llamado urgente, a la transparencia sobre todas las denuncias de abusos y violaciones a los derechos humanos para lograr una compensación en la justicia y reparación de víctimas.

Por otro lado, Bachelet reclamó una justicia más solida y efectiva debido a que el Estado tiene el deber de estar en todo un país garantizando la protección de sus habitantes: “es deber del Estado estar presente en todo el país, implementando un amplio rango de políticas públicas integrales, no solo con medidas drásticas en contra de los responsables de la violencia, sino también brindando servicios básicos y salvaguardando los derechos fundamentales de la población”.

Por su parte, el presidente de Indepaz, Camilo González, dijo: ‘No se nota un plan de acción ni una política pública en el presidente Iván Duque y esto contribuye a que se reiteren los procesos de violencia, que la impunidad siga y que las comunidades indígenas sigan desprotegidas’’ y destacó que el proceso de paz evitó decenas de miles de víctimas.