Así lo anunció la alcaldesa Claudia López en redes sociales junto a la Secretaria de Salud.

El mes de enero fue partícipe del segundo pico de la pandemia en donde se ocasionó un alto nivel de ocupación a camas UCI en la ciudad de casi un 100%, sin embargo, cuando estábamos en un 94,14% a mitades de mes, el panorama ha cambiado porque ahora es de 74,4%.

Esto lleva a la red hospitalaria pasar a Alerta Naranja tras contar con una ocupación inferior al 75% de las camas destinadas a los contagiados por COVID-19.

Todavía se mantiene detención a trabajos quirúrgicos no urgentes de alta y mediana complejidad, solamente están permitidas las bajas que no requieran el uso de cuidados intensivos. Además, todas las entidades médicas deben seguir informando día a día el reporte de casos y seguir llevando a cabo sus protocolos de bioseguridad.

Así mismo para toda la ciudadanía, aunque se haya diminuido la ocupación e incluso los casos del virus, es necesario continuar con la higiene, el uso de tapabocas, lavado de manos, distanciamiento social, evitar encuentros con amigos, familiares, cuidar a los adultos mayores y personas vulnerables.