El Gobierno alemán junto con líderes de los Estados aledaños, toman la decisión de prolongar las restricciones en Alemania que tenían fecha máxima hasta el 7 de marzo.
A pesar que los casos de COVID-19 llevan varias semanas en descenso, las autoridades encargadas afirman que no bajaran la guardia ante la amenaza de nuevas variantes del virus, ya que pueden extender su contagio y así provocar una tercera ola.
Teniendo en cuenta que las próximas semanas serán vitales para el mejoramiento continuo de los contagios en el país, por ende se tomó esa decisión informando también por las administraciones regionales y federales a la ciudadanía que se queden en casa, utilicen mascarilla y reduzcan al máximo los contactos físicos.
Por otro lado, en Alemania ya se ha administrado 3,5 millones de dosis de la vacuna contra COVID-19, además la “promesa” hecha a todos los alemanes, que todos los ciudadanos que quieran vacunarse hasta el final de este verano podrán hacerlo, promesa un tanto arriesgada.