Tras lo ocurrido el pasado miércoles 9 de junio, cuando la comunidad Misak intentó derribar la estatua, el ministerio de cultura decidió trasladarla de este sitio.

Las autoridades indicaron que una posible restauración del monumento podría resultar más complicado que trasladarlo, debido a que el valor de esta decisión ronda los 26 millones de pesos; a partir de este viernes se llevará a cabo una mesa de concertación para definir si volverá a exhibirse en ese espacio o si se envía a un museo.

Así mismo, la Secretaría de Gobierno de Bogotá hizo la denuncia respecto a que un grupo de indígenas Misak intentó derribar la estatua ubicada en la Av. El Dorado con Carrera 100, a lo que la Policía metropolitana de Bogotá intervino.

En videos quedó registrado en momento en el que ciudadanos pertenecientes a la comunidad Misak se encontraban rodeando el monumento mientras un hombre hace forcejeos a la pieza. Del mismo modo, en redes sociales, ciudadanos denuncian que autoridades intervinieron de una manera violenta en contra de los indígenas y que hubo una barrera humana, hecha por uniformados, para evitar que el monumento fuera modificado.

Del mismo modo, también se retiró el monumento de la reina Isabel I de Castilla, ubicado en la calle 26 con carrera 100, por los alrededores del aeropuerto El Dorado en Bogotá. De acuerdo con las autoridades, el retiro de la estatua obedece a las dificultades que representaría una eventual restauración si son vandalizadas.