El pasado martes 20 de julio fue llevado ante el Congreso el proyecto de Inversión Social, impulsado por el Gobierno nacional, mediante el cual se pretende un recaudo de $15,2 billones de dólares al año, enfatizando en que las personas naturales no se verán afectadas e, igualmente, se mantendrá la tarifa actual del IVA.

Dentro del documento se contemplan seis elementos primordiales. Por un lado, están los mecanismos mediante los cuales el Gobierno pretende reunir los recursos suficientes para hacerle frente a la contingencia sanitaria, entre ellos, el descuento del ICA para las empresas; el incremento de la tarifa de renta a las mismas, pasando del 30% al 35% a partir del 2022; la normalización de la información tributaria y la sobretasa al sector financiero, generando un aumento de 3 puntos porcentuales hasta el 2025.

Posteriormente, se plantean las normas que pretenden combatir la evasión de impuestos; luego está la austeridad en el gasto público, haciendo un recorte de gastos desde telefonía, viáticos, etc. Por otro lado, también hay elementos enfocados en la reactivación económica, la sostenibilidad de las finanzas y finalmente la adición presupuestal. A lo largo de los parágrafos hay modificaciones en el Ingreso Solidario, y nuevamente está contemplada la matrícula cero, subsidios, entre otros elementos allí estipulados.

La iniciativa ha sido considerada como una alternativa para ayudar a “los más vulnerables”, así lo manifestó el ministro de Hacienda, Juan Manuel Restrepo, quien estuvo a cargo de la elaboración de esta nueva versión de la reforma tributaria.

Conozca aquí más detalles respecto al proyecto de Inversión Social.